Del aula al mundo
Textos escritos por alumnos, subidos por un profesor, leídos por el universo.
Haikus de 3º año del Colegio Almafuerte
Haikus de 2º año del Colegio Almafuerte
Antología de microrrelatos
A pesar del dolor y las aflicciones, ellos aún lo mantenían vivo.
Micaela Astudillo
Td 100pre stuvo bn asta ese dia…
Amalia White
Ella pensaba que la amaba. Sólo quería estar con él… pero Priscilla no sabía el oscuro secreto que él escondía.
Belén Faust
Toda su vida el más leal; un día, quien lo amaba y cuidaba tanto murió. Él no renunció a las
esperanzas de volverlo a ver, y lo esperó hasta el último día de su vida.
Sofía Bosero
Un vaquero llega en mula Viernes, duerme tres días allí y se va el Sábado.
Facundo Nieva
… Molestar, … Pelear, … Extrañar.
Sergio Cabana
Era un niño común y corriente. Hasta que un día se metió en el agua y se convirtió en sanguijuela.
Mayra Rojas
Unas hormigas van a buscar comida, pero cuando llega la lluvia se ponen nerviosas y no saben qué hacer, hasta que llega un niño y les hace un refugio.
Florencia Brito
Al pez que está volando lo bajan al rio y se prende fuego.
Facundo Nieva
… felices hasta que…
Mayra Rojas
Él estaba sufriendo, no por las heridas de su cuerpo, sino por las de su corazón. Ella lo abandonó cuando más la necesitó.
Belén Faust
Dios dijo: “amarás a todos por igual”. Llegó y no quedó nadie.
Denis Castro
Corre a 120 kilómetros por hora, esquiva a los animales, pero choca con un árbol.
Carlos Alba
Lo mandé a arreglar porque no andaba. Lo arreglaron. Entonces lo rompí todo…
Leandro Romera
Tomó carrera para volar. No pudo.
Lucas De los Santos
Se enamoró profundamente de él; él también la amaba. Lo mantienen en secreto y el tiempo
los separará.
Natasha Zwenger
Viví con él 18 años. La última vez que lo vi fue en el aeropuerto.
Priscilla Legrini
Ella fue a cenar muy contenta. No se dio cuenta de lo que la estaba esperando.
Amalia White
Un ladrón se llevó una casa. Por unas horas nadie en el barco se dio cuenta. Sólo la nena.
Facundo Nieva
Dos chicas se pelean, no saben por qué, en un boliche, y al día siguiente se saludan como si nada.
Nicolás Zwenger